¿Qué es el patronaje y qué tipos existe?

Si te apasiona la moda, seguro que alguna vez te has preguntado cómo se transforman las ideas de un diseñador en prendas reales que se pueden vestir. Aquí es donde entra en juego el patronaje, una disciplina clave dentro del proceso de creación de ropa. Aunque muchas veces el protagonismo se lo lleva el diseño final, sin el trabajo de patronistas y modelistas, la industria de la moda no funcionaría.

Hablemos de qué es exactamente el patronaje, qué tipos existen y por qué es tan importante para cualquier persona que quiera estudiar un grado en diseño de moda. También veremos qué habilidades necesita un buen patronista y cómo puedes formarte para convertir esta profesión en tu futuro.

¿Qué es el patronaje?

El patronaje es el proceso mediante el cual se crean los patrones que servirán como base para confeccionar una prenda de vestir. Un patrón es, básicamente, una plantilla en papel o en formato digital que indica el tamaño, la forma y las piezas necesarias para cortar la tela y ensamblarla correctamente.

Este proceso se sitúa justo después de la fase de diseño y antes de la confección. El patronista traduce el dibujo del diseñador en moldes que luego serán usados para producir la prenda de forma individual o en serie. Por eso, el patronaje no solo exige creatividad, sino también precisión técnica y un profundo conocimiento del cuerpo humano, de los tejidos y de las técnicas de costura.

Tipos de patronaje

Existen diferentes tipos de patronaje según el método utilizado y el tipo de prenda a desarrollar. Los principales son:

1. Patronaje plano

Es el más tradicional y académico. Se basa en el uso de medidas estandarizadas del cuerpo humano para dibujar patrones en papel. Cada pieza de la prenda se desarrolla en dos dimensiones (plano) y luego se transforma en una prenda tridimensional al ser cosida. Es muy utilizado en la industria por su precisión y por permitir una planificación detallada de la prenda antes de cortarla.

2. Patronaje drapeado o moulage

Este método consiste en trabajar directamente sobre un maniquí, utilizando una tela (generalmente muselina) que se ajusta y se modela al cuerpo en tiempo real. El resultado se traslada luego al papel para convertirlo en patrón. Es un sistema muy apreciado en la alta costura, ya que permite una mayor libertad creativa y un ajuste perfecto al cuerpo.

3. Patronaje digital

Con los avances tecnológicos, cada vez es más común el uso de programas informáticos especializados en patronaje. Estos software permiten diseñar, modificar y escalar patrones de forma mucho más rápida y precisa, además de facilitar la comunicación entre los diferentes departamentos de una marca. También ayudan a reducir errores y a optimizar el uso de materiales.

¿Qué hace un patronista?

El patronista es el profesional encargado de desarrollar los patrones necesarios para confeccionar una prenda. Su trabajo es interpretar los diseños, crear las plantillas, hacer pruebas y ajustes y, en muchas ocasiones, colaborar directamente con el diseñador para asegurar que el resultado final cumpla con sus expectativas.

Entre sus tareas habituales están:

  • Elaborar patrones base y escalarlos a diferentes tallas.
  • Realizar pruebas de vestibilidad en prototipos.
  • Modificar los patrones según indicaciones del diseñador o del departamento técnico.
  • Optimizar el consumo de tejido y garantizar un buen ajuste.
  • Colaborar con el equipo de producción para asegurar la viabilidad de los diseños.

¿Cómo ser patronista?

Para convertirte en patronista necesitas una formación específica en diseño de moda o en patronaje industrial. Aunque existen cursos especializados, la mejor opción para adquirir una base sólida y tener más oportunidades laborales es cursar un grado en diseño de moda. Este tipo de formación no solo te enseñará técnicas de patronaje, sino también diseño, historia de la moda, marketing y gestión de colecciones.

Además de la formación, también es importante desarrollar habilidades como:

  • Capacidad espacial y visión tridimensional.
  • Atención al detalle y precisión matemática.
  • Creatividad y sentido estético.
  • Conocimientos de tejidos y comportamiento de las telas.
  • Dominio de software especializado (como Gerber, Lectra o Clo 3D).

¿Qué salidas profesionales tiene?

La figura del patronista es muy demandada en la industria de la moda, tanto en pequeñas marcas como en grandes firmas. Puedes trabajar en empresas de confección, estudios de diseño, talleres de alta costura o incluso lanzar tu propia línea de moda.

Algunas de las salidas más comunes son:

  • Patronista industrial o de alta costura.
  • Modelista o técnico de escalado de tallas.
  • Diseñador técnico.
  • Especialista en fitting y pruebas de vestibilidad.
  • Consultor de producción textil.

El patronaje es una parte fundamental del mundo de la moda. Aunque no siempre sea tan visible como el diseño o la pasarela, su papel es clave para transformar las ideas en realidad. Si sueñas con formar parte de esta industria y quieres aportar con tu creatividad y tus habilidades técnicas, estudiar diseño de moda es el primer paso para convertirte en patronista y abrirte un futuro lleno de posibilidades.

Compartir en: Twittericono twitter Facebookicono facebook Pinteresticono pinterest

También te puede interesar