A pesar de que se van dando grandes pasos, la sexualidad femenina sigue siendo un tema complicado. Hoy os queremos compartir, y desmontar, mitos sobre la sexualidad femenina que debes conocer.
Son muchos los mitos, tabúes y prejuicios que siguen impidiendo que una mujer pueda disfrutar libremente de su cuerpo. A veces son los impuestos por la sociedad, otros por la cultura y la educación, y otros por una misma. Por ello, me parece fundamental que cada una os paréis un momentito a pensar cómo son vuestras relaciones, tanto con vosotras mismas como con vuestras parejas sexuales.
El sexo solo es penetración
Una relación sexual es muchísimo más que una penetración, si esto no está claro, “Houston, tenemos un problema (y añado) de los gordos”. El erotismo puede comenzar incluso sin tocar a la otra persona, pues un juego de miradas o un intercambio de sonrisas puede ser el mejor comienzo para ponerse a tono, ni qué decir cuando incluimos el tonteo verbal. Se puede continuar con caricias furtivas, besos, mordiscos y todo tipo de juegos manuales u orales, que sea la experiencia más impresionante, sin que tenga que haber un coito. De verdad, el sexo no solo es “que la metan”, si consigues sacar el coito de la ecuación durante unos días, redescubrirás tu cuerpo y tu placer.
Solo se siente placer en los genitales
Bien vale esto para un momento de masturbación como para una relación con otra persona. Si tienes algún juguete erótico en casa, desde la tienda Diversual nos pasan esta recomendación: dedica tiempo a otras partes de tu cuerpo que no sea expresamente el clítoris o la vagina, estimula los labios externos y los internos, las zonas aproximadas a los mismos, descubrirás que puedes sentir muchísimo más de lo que imaginas y que eso también te hará pedirlo en tus relaciones. ¡No te defraudará!
La piel no es erógena
Redescubre tu piel, redescubre la piel de tu pareja y que redescubra la tuya. Si nunca habéis jugado a esto, os vais a quedar impresionadas cuando os acariciéis -u os acaricien- por todo el cuerpo, pues hay zonas súper sensibles y excitantes que aunque no os hagan llegar al orgasmo os pueden hacer sentir muchísimo. Para ello, podéis utilizar las manos, los labios, los dientes, plumas, chocolates o velas fundidas… Esto va en gustos.
Una mujer que disfruta del sexo es una mujer fácil
Hoy día ¿qué es una mujer fácil? o ¿por qué seguimos hablando de mujeres fáciles en cuanto al sexo? ¿Tanto miedo nos da que haya mujeres, como nosotras, que puedan disfrutar de su cuerpo sin tantos tabúes? Porque, queridas mías, puede que haya algún hombre que piense de esta manera pero somos más nosotras las que enjuiciamos a las otras por poder hacer lo que a nosotras tanta vergüenza nos genera, tantos tabúes o prejuicios.
Tener sexo durante la regla es antihigiénico
¡Grave error! No solo no es antihigiénico es que es una absoluta maravilla. El dolor de regla desaparece porque toda la zona se relaja, aumenta el placer porque todo tu cuerpo está mucho más sensible y puedes disfrutar muchísimo.
Si no hay orgasmo es que no hay placer
Tener orgasmos es una maravilla pero no tenerlos no quiere decir que no se pueda sentir placer. Dedica tiempo a conocerte, cómo son tus genitales, dónde sientes más o menos placer, si eres capaz o no de dejarte llevar… Y si tienes dudas, habla con tus amigas o consulta con profesionales, te aseguro que no eres la única aunque muchas no lo cuenten.
El sexo solo es aceptable en una relación de amor
El sexo y el amor no siempre van de la mano, ni tienen por qué ir de la mano. Muchas mujeres piensan que si se acuestan con un hombre se van a enamorar de él y esto no tiene por qué ser así, más bien suele ser un prejuicio porque si hay sexo en una relación de pareja todo es correcto pero si lo hay sin tener un compromiso, entonces ¿qué tipo de mujer soy?
